Para continuar con la serie sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por la ONU, ahora nos referimos al de promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible, el empleo y el trabajo decente para todos.Aunque a países como México le convendría mucho retomar tasas de crecimiento más altas en los próximos años, esto no basta.
En el seno de la ONU ha crecido la convicción de que el aumento del PIB por sí mismo es insuficiente, si no beneficia a todas las personas. Nadie puede quedar fuera en el avance de todos los países, especialmente los más atrasados en desarrollo económico.Una de las formas básicas de lograr que el desarrollo económico se distribuya es el trabajo.
Por ello, hoy se propone una economía incluyente, con la mayor oferta de empleo posible, evitando la discriminación por cualquier motivo. Igualmente, ha adquirido importancia el concepto de “trabajo decente”, es decir, uno que permita al asalariado una vida digna.Además, el empleo sostenible no puede ir en contra de los objetivos de cuidado del medio ambiente. La opción entre empleo y cuidado ecológico es una alternativa falsa al hablar de desarrollo económico.
Por ello, el ODS número 8 se propone para 2030:
· Mantener el crecimiento económico per cápita de conformidad con las circunstancias nacionales y, en particular, un crecimiento del producto interno bruto (PIB) de al menos 7% anual en los países menos adelantados.
· Lograr niveles más elevados de productividad económica mediante la diversificación, la modernización tecnológica y la innovación, entre otras cosas centrándose en los sectores con gran valor añadido y un uso intensivo de la mano de obra
.· Promover políticas orientadas al desarrollo que apoyen las actividades productivas, la creación de puestos de trabajo decentes, el emprendimiento, la creatividad y la innovación, y fomentar la formalización y el crecimiento de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, incluso mediante el acceso a servicios financieros
.· Mejorar progresivamente la producción y el consumo eficientes de los recursos mundiales y procurar desvincular el crecimiento económico de la degradación del medio ambiente, conforme al Marco Decenal de Programas sobre modalidades de Consumo y Producción Sostenibles, empezando por los países desarrollados
.· Lograr el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todas las mujeres y los hombres, incluidos los jóvenes y las personas con discapacidad, así como la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.
· Reducir considerablemente la proporción de jóvenes que no están empleados y no cursan estudios ni reciben capacitación.
· Adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas contemporáneas de esclavitud y la trata de personas y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y, de aquí a 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus formas.
· Proteger los derechos laborales y promover un entorno de trabajo seguro y sin riesgos para todos los trabajadores, incluidos los trabajadores migrantes, en particular las mujeres migrantes y las personas con empleos precarios.
· Elaborar y poner en práctica políticas encaminadas a promover un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos locales
.· Fortalecer la capacidad de las instituciones financieras nacionales para fomentar y ampliar el acceso a los servicios bancarios, financieros y de seguros para todos.
· Aumentar el apoyo a la iniciativa de ayuda para el comercio en los países en desarrollo, en particular los países menos adelantados, incluso mediante el Marco integrado mejorado para la asistencia técnica a los países menos adelantados en materia de comercio.
· Desarrollar y poner en marcha una estrategia mundial para el empleo de los jóvenes y aplicar el Pacto mundial para el empleo de la Organización Internacional del Trabajo.
En cuanto a este objetivo, México ha registrado un fuerte retroceso en el PIB per cápita y en el combate a la pobreza. Uno de los motivos está en el pandemia, pero también se encuentra un foco en la falta de inversión productiva. Entre 2016 y 2021 el ingreso medio por hora ha crecido de 30 a 40 pesos, pero el número de personas en situación de pobreza laboral ronda actualmente 38.5%. Es decir, casi cuatro de cada 10 personas empleadas no puede comprar la canasta básica con su salario.En años recientes, el salario mínimo se ha incrementado por encima de la inflación por iniciativa oficial. Sin embargo, la única forma de lograr un empleo inclusivo y “decente” es a través de la generación de muchos puestos de trabajo más, por medio de un ambiente propicio para la inversión.
